Palazzo dei Priori

Muero por cogerla entre mis brazos, sentir cada parte de su cuerpo y asegurarme de que esta a salvo... no puedo dejar de mirarla, esta hermosa, a pesar de estar separados nuestras miradas siguen sujetas en el aire, no se pierden, no se expiran, siempre unidas.. como lo prometimos una vez.

- Perfectamente - respondo con indiferencia a la pregunta que ha cuestionado Aro sin apartar mis ojos de Bella.

La sala se mantiene en silencio durante unos segundos, a la espero de que diga algo mas, pero me mantengo en silencio... Aro rompe de nuevo el tormentoso silencio.

- Entonces Edward.. ¿Que te trae por acá? - se hace el que no sabe, algo tan propio de él..

- Sabes bien que me trae por acá - digo firme pero con respeto, no quiero empeorar la situación...

Edward empieza a sulfurar a Aro, no leo sus pensamientos pero esas respuestas... Ya sé que me lee la mente pero tampoco estoy pensando nada importante, salvo que Bella esta muy nerviosa, Y NO TE QUIERE AQUÍ.
No creo que pille la indirecta así que lo repito. LÁRGATE te vas a meter en problemas.
Obviamente no me hace ni caso.

-Bueno Edward ya que has interrumpido nuestra fiesta.-Responde Aro un poco más seco.-Podrías decir abiertamente que deseas de nuestra humilde casa.-El vegetariano lo fulmina con la mirada pero enseguida vuelve a mirar a Bella que me mira a mi con preocupación. Sin leerle la mente sé que esta nerviosa y que quiere que Edward no este para que este a salvo.

-Vengo a por Isabella Swan.-Dice en voz alta, seguro de si mismo.

-Primero ella tendrá que querer irse ¿verdad?-Responde Aro mirando a Isabella. Su mirada es una amenaza, si ella dice que quiere irse no puede pasar nada bueno.

-Recuerda lo que acordamos Bella, Edward correrá peligro.-Le susurro. No es una amenaza ni nada por el estilo es tan solo algo que sabe, pero que alguien tiene que recordarle.

A pesar de que Demetri susurra, pude escuchar lo que le decía a Bella. Y era verdad, Edward corría peligro.. Pero pensándolo bien, Edward sin Bella no era nada, y viceversa.

- Claro... que no. - responde Bella, dudando.

- Bien - Aro y su típica sonrisa maquiavélica. Junta los dedos de sus manos y toma la mano de Bella, al mismo tiempo que se gira hacia nosotros:

- Ya que estáis aquí, y que por supuesto Bella se quiere quedar, sigamos con la fiesta, ¿o no?

- Malditos vegetarianos.. - se le escucha susurrar a Cayo. Aro le lanza una mirada envenenada y hace como que no ha escuchado nada.

- ¿Desea usted bailar conmigo, Isabella?

Mierda, que no se mate por favor - pienso.

CALABOZOO...

-Mierda, Nahuel, tenemos que salir de aquí, no te das cuenta? Ellos no son malos- le digo mientras lo obligo a levantar la cabeza

-Sueltame- dice se´parandome de él- dejame ok?

-DEJA DE ESTAR ASÍ, LO SIENTO, YA NO VOLVERÉ A HACER LO QUE HICE- comienzo poco a poco a levantar la voz

Pasan 20 minutos y casi tiro la toalla, pero Nahuel empezo a caminar en círculos mientras yo estaba sentada, se acerca a mí.

-Vamos, Cam salgamos juntos de esto- me dice mientras sonrio- disculpame estaba ... olvidalo

Nahuel, hizo algunas cosas para atraer a los guardias, que en realidad solo había uno, los demás estaban en una "fiesta". Nos demoramos bastante para salir de aquel lugar, y cuando pénsabamos que estabamos a salvo. A parecieron más guardias y lo único que hicimos fue ponernos unas túnicas negras que estaban cerca al calabozo.

No encontrabamos salida de ese lugar..

-Hermano, creo que Alice ha estado por acá... siento su olor.

Involuntariamente, y en contra de Demetri que opina que es mejor dejar a Aro a solas con ellos, me acerco hasta su posición, simplemente para escuchar, o quizás para estar más cerca de él. Sus ojos dorados no dejan de escrutarme en silencio, seguramente preguntando por qué vine aquí sin decirle nada.

- ¿Desea usted bailar conmigo, Isabella? - la voz de Aro me saca de mi estado mental vegetal, casi me da un vuelco al corazón cuando escucho eso de... bailar, con el rey de Volterra, el vampiro supuestamente más temido.

Y trato de buscar rápidamente una excusa que sea válida, no quiero que se tome como una insolencia. Realmente quisiera decir a todo que sí, con tal de que Edward estuviera a salvo. Pero él ya estaba aquí.

- Lo cierto es que Demetri ya ha ocupado un tanto por ciento muy alto de mi cupo de baile por hoy - y para toda la vida, pienso también.

Y de pronto la cara de Aro cambia, no logro entender el por qué. Empiezo a pensar que es algo que he dicho, y me arrepiento en seguida. No me costaría tanto bailar. Antes de que pueda decir nada más recupera su sonrisa, esa que no logro descifrar si tiene algo de sinceridad o es simplemente pura falsedad.

- Está bien, seguid disfrutando de la fiesta, en seguida vuelvo - ladea la cabeza sonriendo, y desaparece al fondo de la sala.

Mi baile con Isabella debe esperar, desde el momento en que Felix roza sus dedos con mi espalda al pasar por detrás de nosotros. Parece que los otros invitados de esta noche, los cuales tienen el mismo honor que merece un calabozo, han decidido jugar al escondite.

Cruzo hasta el otro extremo de la sala, y por el camino mi mano se entrelaza con la de Chelsea.

- Estás muy elegante querida - comento mientras salimos del salón principal.

- Gracias amo, ¿algún problema?

- Sólo te robaré unos minutos. Parece que tus invitados tienen un poco de prisa por marcharse, o eso creen - sentencio.

Continuamos avanzando por diversos pasillos, hasta que en una esquina vuelvo a ver a Felix, que señala con la cabeza hacia el pasillo que toca a continuación. Puedo ver en sus ojos las ganas de deshacerse de esos dos niños, su sangre es demasiado dulce, pero muevo la palma de mi mano en señal de calma, todavía no es la hora. No hasta que sepamos más.

Doblo la esquina, y caminando en mi dirección dos cabezas gachas cubiertas con túnicas Vulturi, caminan a paso bastante tembloroso. Cuando quedan más o menos unos 7 metros para llegar a nuestra posición, actúo. Un aplauso. Dos, y hasta cuatro. Palmadas separadas en el tiempo, que podrían ser de ovación pero en realidad sólo se burlan de un patético intento de huida. Huida; del Palazzio dei Priori. Enfatizo más mis palmadas con una sonrisa burlona.

- Pero qué tenemos aquí - los dos extremos del pasillo se cubren de guardias, avisados de antemano, para impedir que ninguno de estos chiquillos de condición extraña puedan escapar.

Aro desaparece de la sala y por un momento siento un leve alivio. Quizás ahora pueda acercarme a Bella y envolverla en mis brazos al menos por unos segundos... serian suficiente para mi en estos momentos.

Pero todo mi deseo se hace añicos cuando mi mirada se topa con la de Demetri. Me hace recordar que el hecho de que Aro se haya marchado no cambia absolutamente nada.. el siempre estaría al mando de cualquier situación en la ausencia de su amo.

Estoy a punto de dar un paso al frente pero la mano de Alice me sujeta y me hace volver a mi sitio. No dice nada pero enseguida leo sus pensamientos - Quedate quieto y procura no empeorar las cosas - Solamente asiento y me quedo quieto, pero las ganas me carcomen... miro fijamente a mi amada. Me resulta casi imposible tenerla tan cerca pero tan lejos a la vez. Solo deseo que esta pesadilla acabe y que Bella este a mi lado... por siempre.

Todos quedamos mirando a Aro, como se va.. No sé porque, pero me da la sensación de que regresará pronto.
Edward sigue mirando a Bella, ella a él, y tuve que decirle, mediante mis pensamientos, que no fuera hacia ella, eso empeoraría las cosas.

- Ten paciencia Edward, ya verás como todo saldrá bien..

Me mira con cara de.. ¿dolor? ¿pena? No lo sé exactamente, pero creo que mi pensamiento no era demasiado convincente...

De pronto aparece un bosque, que me resultaba familiar, y Edward y.. Bella corriendo juntos. Pero hay algo diferente. No es la Bella de siempre, con sus mejillas rosadas, su corazón latiendo a mil al estar cerca de Edward.. No. Es la nueva Bella, la de tez pálida, y de una belleza espectacular. Vampira.



Creo que esto voy a tener que enseñárselo a Aro - pienso, mirando a mi hermano.

Y todos seguimos sin dar un paso, a la espera del regreso de Aro.

Al verlos ahí la ira me lleno, como podían al menos pensar que podían imaginar q así de fácil se podría escapar de los Vulturis. Eso era una estupidez, había cavado quizás hasta su propia tumba.

Siento como mis piernas se mueven rápidamente y tomo de la muñeca a la humana, estrujo su mano y ella emite un quejido.

La miro con Desprecio a los ojos, un guardia toma a su hermano o lo que sea de ella, quería darle su lección pero debía controlarme ante mi amo.

-Amo que debemos hacer con ellos, merecen un castigo?..-Pregunte esperando que la respuesta Sea un rotundo si, la mire y le susurre- Morirás esta noche por tu impertinencia, me las pagaras..-Esperando una respuesta de mi amo.

Oh por dios! no habia pasado ni dos meses desde que fuimos Forks y ahora estamos a punto de morir..

-Quienes son?- digo algo extraña, esperando al menos una respuesta pero lo único que consigo son miradas de repugnancia, y de extrañez.

-Jajaja- Chelsea sonrie con forme pasan los segundos

-Que sucede? insito sin conseguir respuesta..

Edward tiene cara de dolor, y Alice mantiene esa mirada que, ahora ya conozco, es cuando está teniendo una visión. Y por la cara que pone Edward no debe de ser nada bueno. ¿Algo que tiene que ver con los Vulturis, y conmigo, quizás?

- ¿Otro baile, o tu novio ha interrumpido lo bien que lo pasábamos? - pregunta Demetri en voz suficientemente alta, el jaleo y la música ha vuelto a su tono normal, y la fiesta continúa.

- En realidad me gustaría estar con él - respondo mirando a Demetri, pensando que incluso, podría tratar de convencerlos de que se fueran; bueno, dudaba mucho que se dejasen convencer.

La visión de Alice me tranquiliza, quiere decir que Bella saldrá bien de todo esto. Pero por otra parte no puedo evitar inquietarme. ¿ Ocurrirá eso pronto o en mucho tiempo?. De ser así tendríamos que hablar al respecto. Todo esta sucediendo demasiado rápido y aunque suene loco temo por el futuro.. porque Bella es mi futuro.. y cualquier cosa que pueda ocurrirle me hiere a mi mismo.

Escucho lo que le dice a Demetri y una chispa en mi interior se enciende. Quiero tenerla cerca y sentirla.. miro a Alice de reojo que ha escuchado lo mismo y ella me pica un ojo, en señal de que todo estará bien.

- No tardes demasiado Isabella - le advierte Demetri.. y odio que lo haga - procura no hacer nada indebido.

Y en cuanto Bella se acerca a nosotros en menos de un segundo, me acerco a velocidad vampirica hacia ella y la envuelvo en mis brazos. Siento su piel tibia por debajo de aquel precioso vestido. Y aquí, justo en mi brazos me siento en calma, en paz... así estemos rodeados de vampiros despiadados.

-Bella dejaría encantado que malgastases tu humanidad con un vámpiro tan poco varoníl y con un inexistente orgullo. Pero me temo que si lo hago él, yo y posiblemente tu acabemos sin cabeza.-Parece dudar pero no se mueve.

-Pero Demetri si no se lo decimos.

-Isabella hay unos 80 vámpiros más en este salón y te aseguro que algunas me castrarían. Así que no podemos hacer un "yo no he visto nada".

-Pero... Porfavor.

-Isabella si pudiese os reservaba yo mismo un motel para que liberaséis vuestra tensión sexual pero como te he dicho aquí consiste en no poder y no en no querer. Un segundo.-Y se encuentran, dios me entran repentinas ganas de potar.

Pasan unos minutos que me parcen eternos. Como me corten los huevos juro que yo mismo me cargo al Cullen.

-Edward es suficiente.

-No.-Dice acercándosela.

-Edward como lo tenga que repetir tienes un grave problema.

-He dicho que no.-En un segundo agarro a Alice ni siquiera lo pienso. Actuo.

-Encantado de volver a verte Alice, siempre es un placer.-Digo en un susurro-Siento que tu hermano sea uj irresponsable. Edward te juro que no lo repito mas veces.

- Tranquilos no me hará nada - comenta Alice por lo bajo.

- ¿Apostamos? - dice Demetri levantando una ceja.

Y no sé por qué no me gusta el tono, como si hubiese cambiado su chip a Vulturi, o como si hubiese cambiado el chip a villano antes que a galán anfitrión. Pero no quería que Alice estuviese en peligro, ni Edward tampoco. Dudo si dar un paso adelante, lo que me recuerda que estos tacones son demasiado altos para lo que acostumbro a usar (osea zapatillas).

- ¿Qué quieres que haga? - pregunto dudosa, no sé si pretende que estemos tan cerca y tenga que ignorar a Edward como si nada.

- Te quedarás a mi lado - afirma Edward tajante apretándome contra él, y mirando desafiante a Demetri, como leyendo su mente.

Si si leeme la mente cabrón y la de los 80 asistentes que estan en esta sala. Quizás yo no seré capaz de cargarme a tu hermana pero los 79 restantes no tendrán ningún problema en colgar vuestra cabeza de un palo.

-Edward mira yo sé que lo tuyo no es la diplomacia, lo has dejado claro tranquilo. Pero Bella no es un puto país invadido es una persona que ha decidido salvarte el cuello haciendo lo que tu eres incapaz de hacer. Así que haznos un favor a todos y no me hagas llamar a Aro porque no te preocupes que si viene el tu y tu hermana os quedaréis en una cripta e Isabella llevará el apellido Vulturi.

-Eso jamás

-¡Ves! Hay esta la controversia... Tu te crees que mandas pero en realidad con una frase mía tu cabeza en esta sala ya no pinta nada.

Demetri me agarra y tras discutir con Edward, pone su mano en mi cuello. Pero, al fin y al cabo, yo sé que no se atrevería a hacerme nada. O eso creo.

- Cullen, no te lo repito más veces.

- No lo harás nada. Asi que suéltala.

- ¿Apostamos? - vuelve a repetir.

No jodas. ¡Soy muy ''joven'' para morir!

- Hazlo entonces, ya que eres tan valiente.

- ¿QUE QUÉ? Edward... - ¿está loco?

- ¿Seguro?

Y se que no hara daño a mi hermana. Él sabe que su amo nos considera demasiado valiosos como para hacernos daño... y tampoco es que estamos haciendo algo indebido, todo sigue como antes, solo que Bella se encuentra a mi lado..

- No harías lo que tu Amo no te ha mandado, podrías ser una gran desilusión para él. - digo con voz firme.

- Puedo remediarlo si llego a cometer un error... - dice aun sujetando el cuello de Alice, salvo que ahora comienza a dudar.. llevo razón en lo que digo. Él nunca haría nada que hiciera enfadar o defraudar a Aro.

-Edward quizás no la mate pero no tendré ningún problema en torturarla.-Digo mirándo fijamente. Y si, eso si soy perfectamente capaz de hacerlo y no creo que a Aro le moleste.-He sido cortés y te he dejado saludar a Bella te he pedido educadamente que era suficiente y que haces tu? Negarte, contradecirme, pasarte las leyes, una vez más por donde has querido. Pero sabes qué? Que si a ti no te importa ser martir haremos algo que te duela más.-Estampo a Alice contra un muro, le suelto una bofetada que la tiea al suelo y la hace gemir. La pego si, es cierto no quiero matarla y sinceramente no me es agradable pegarla pero si un cullen es gilipollas no es culpa mía.

Demetri golpea a Alice y me quedo de piedra. Obviamente eso no va a hacerle nada y en un par de segundos sigue como siempre. Pero las cosas pueden ir a peor. Alrededor todos se han quedado momentáneamente parados, esperando la próxima reacción. Si Edward se abalanza sobre Demetri aunque no esté Aro ambos quedarán muy mal parados.

- ¿Estás loco? - me dirijo a Demetri separándome de Edward al momento, que va a ayudar a Alice.

- Los Vulturis no damos segundas oportunidades, y menos doscientas. Exigimos respeto, él debería saberlo - responde aún un poco furioso.

Vuelvo a mirar a Edward y esto no me gusta nada, tengo que hacer lo que sea.

- Pues - me armo de valor y apretando los labios hablo a Demetri de nuevo - es mi fiesta y no quiero que la estropees. Así que compórtate.

Trato de sonar con algo de autoridad, pero lo más seguro es que suelte una carcajada por tratar de que haga algo, o simplemente porque me envalentone a decir eso. Aunque al final lo ha conseguido, me he separado de Edward, por ahora.

- Mi nombre es Aro Vulturi, y ésta - señalo con las manos a ambos lados - es mi guardia. Velamos por las leyes y somos justicieros, de los seres... superiores - no tengo claro todavía de que sea un vampiro, pero algo es, y sé que puede ser una amenaza, aunque a un mínimo movimiento su cuello estaría roto y a juzgar por sus constantes latidos acelerados, no iba a revivir.

- Y que quieren de mí, y de mi hermano - responde temblorosa.

- Las preguntas las hacemos nosotros - digo con paciencia, pero cierto tono de ira en la voz.

Doy un par de pasos hacia la niña, colocándome por encima de su cabeza. La miro a los ojos, y puedo sentir su miedo al mirar mis pupilas escarlata.

- Dinos qué clase de ser eres - escupo con aliento gélido.

No me rio suspiro, sinceramente esto me agota. Dos guardias apresan a Alice sin hacerle daño. Bella, valiente y estúpida como ella sola esta en medio de la sala junto a Edward.

-¿Tu fiesta? Tu palacio, tu novio, tus guardias, tu perro faldero ¿Algo más? -Digo sentándome en un sillón.-¡Cada día aprendo algo nuevo!

-Nos vamos Bella.-Dice Edward.-Suelta a Alice Demetri.

-Claro, y de paso reservo los billetes para Forks. No, no suelto a Alice y Bella no se va a ningún sitio.

Y esta situación me cansa.. me enfurece, si, me enfurece. No puedo soportar tener a Bella lejos de mi, pero tampoco soportaría que algo malo le llegase a suceder a Alice por mi culpa. Porque si, todo esto es por mi culpa, tan solo mía y demasiadas personas importantes están en peligro por eso.

Entonces pienso que debo bajar la guardia, calmarme un poco para así no empeorar las cosas.

- Esta bien Demetri - me cruzo de brazos - haremos las cosas como ustedes digan...

-¡Anda mira aquí el rey de volterra ha tenido una iluminación divina!-Digo levantándome.-Soltadla.-Digo a los guardias que custodian a Alice.-Lo siento querida, de verdad, pero si no aún estaríamos discutiendo los problemas jerárquicos de este palacio.-No es que mi idea de soltarle dos bofetadas y un empujón haya sido muy correcto pero dios estos vegetarianos me pueden.

-¿Queréis algo de beber mientras esperamos a Aro? Por supuesto todo biológico, creo que hay conejitos por el bosque podemos pedir algunos de aperitivo.-digo mientras Alice y Edward toman asiente frente a nosotros.

Después de dos bofetadas, un empujón y amenazas.. por fin me soltó. Hace dos minutos jamás llegué a pensar que Demetri sería capaz de hacerme esto. Ahora sin embargo sí.. Todo el ''cariño'' que le tenía, por así decirlo, se ha ido a la mierda en este mismo instante.

- Todo biológico, un detalle querido Demetri - digo con ironía - Ya que tenemos que quedar aquí, tráenos algo de beber.. - si, estoy de malas, pero mejor me callo o salgo de aquí sin vida.

- Se dice ''por favor'', y gracias - me guilla un ojo y llama a dos guardias para que nos traigan sangre, pero no cualquiera, si no de animal, mientras esperamos a Aro.

Se ha enfadado un poquito, obviamente un poquito de mujer que eso es como un universo de hombre. Nunca he entendido como se medían los enfados ¿en pizcas? En fin, traen dos copas y una jarra con sangre de jabalí.

-Lo siento no hay osos en Italia... pero espero que sea de vuestro agrado.-Le tiendo un vaso de agua a Bella por si tiene sed y cojo una copa de vino para mi, tampoco quiero molestarles con el olor.-Chín-chín.-Digo alzando la copa.